Ubicado en Bundibugyo, en Uganda occidental, el cacao del Bosque Semuliki es cultivado por más de 2500 pequeños agricultores orgánicos de los cuales el 52 % son mujeres. Situado en una zona privilegiada, es hogar de algunas de las especies de fauna y flora más sorprendentes del continente africano

El cacao es cosechado por más de 2500 agricultores orgánicos certificados. La empresa Latitude se encarga de comprar directamente de las fincas y pasa a controlar el proceso de fermentación, lo que permite una consistencia y una mayor calidad en el resultado final. Además, Latitude lleva a cabo numerosas iniciativas para mejor la vida de los agricultores de la región.

El Bosque Semuliki

A apenas media hora en coche de la ciudad de Bundibugyo se encuentra el Bosque Semuliki, situado en la base de las montañas Rwenzori. Fue declarado parque nacional en octubre de 1993 y es uno de los parques nacionales más nuevos del país. Posee 194 kilómetros cuadrados y se trata de una de las zonas más ricas en diversidad de flora y fauna de África, destacando especialmente por el gran número de especies de aves que sobrevuelan la zona.

Registra una precipitación media de 1250 mm al año y la región produce más del 70 % del cacao en Uganda. Esto ha hecho posible que se haya convertido en un lugar perfecto para invertir en prácticas de cosecha y fermentación de calidad.

Los agricultores del Bosque Semuliki

La empresa encargada de organizar a los agricultores de la zona se llama Latitude Craft Chocolate. Fundada en 2016, su objetivo es utilizar el chocolate como una herramienta para crear empleos locales y mejorar de manera sostenible los ingresos de los pequeños productores de cacao en Uganda.

A través de su programa de proveedores, los agricultores reciben: capacitación (desde agronomía orgánica hasta educación financiera), seguros y acceso a financiamiento. Además, Latitude paga un precio un 50% más alto que los precios en Ghana y Costa de Marfil, los principales países productores de cacao del mundo.

*Fotos: Rabobank